De origen francés, San Lesmes llegó a nuestra ciudad en el siglo XI como parte de séquito del rey Alfonso VI y aquí fundó el monasterio de San Juan Evangelista. Este monje benedictino alcanzó gran renombre no sólo por su labor social con peregrinos y ciudadanos burgaleses, sino también por el papel que desempeñó en el saneamiento urbano gracias a sus conocimientos de ingeniería, llegando a asesorar al concejo municipal sobre la desecación de zonas pantanosas e insalubres.
Por todo ello los burgaleses le escogieron como patrono, y es en las inmediaciones de la iglesia que lleva su nombre donde cada año se celebra su onomástica.
La corporación municipal y las autoridades francesas invitadas recorren juntos el camino entre el Ayuntamiento y la iglesia de San Lesmes, escoltados por guardias vestidos de gala. Les acompañan los Gigantillos, danzantes, dulzaineros y peñas de la ciudad. Una vez allí tiene lugar la ceremonia religiosa, en la que el Alcalde, en representación de todos los burgaleses, ofrece un cirio y panecillos al santo.
Tras el acto, los grupos folclóricos, danzantes y Gigantillos bailan y animan la fiesta. Es habitual que los burgaleses acudan a degustar los pinchos que se ofrecen en los distintos puestos (chorizo y morcilla). También es el momento de comprar uno de los tradicionales panecillos de San Lesmes, que se encargan de vender los jóvenes de la parroquia. Conciertos y diversas manifestaciones culturales y deportivas se suceden los días anteriores y posteriores a esta festividad.
Cada año, se encargan de coordinar y organizar los actos que conforman el programa de San Lesmes, el Ayuntamiento de Burgos (a través del área de Fiestas de la Gerencia Municipal de Cultura y Turismo) junto con la Hermandad de Peñas y Sociedades de San Lesmes Abad, la Hermandad Adelmus y la Iglesia de San Lesmes abad.
La Hermandad Adelmus se encarga de atender la estancia de los peregrinos franceses de Loudun, que vienen invitados a nuestra ciudad
La Federación de Peñas y Asociaciones de San Lesmes Abad, se encarga de programar diferentes actos culturales y organizar los aspectos gastronómicos de la fiesta. Además, desde 1988, entregan cada año el BÁCULO DE ORO DE SAN LESMES, un premio que creado para reconocer a aquellas personas e instituciones que se distinguen por enaltecer el nombre de Burgos o que han destacado por su actividad en beneficio de la ciudad de Burgos y la provincia.
Además, y desde del año 2006 la Federación de empresarios de hostelería de Burgos organiza el concurso de Tapas de San Lesmes, una ocasión única para sorprender al paladar con una serie de pinchos variados y muy imaginativos.